En mayo escribíamos sobre el intento de imputarnos (penalmente) por la publicación del enlace Los trolls del ciberspacio (y el relacionado). Acabamos de recibir la copia del auto de sobreseimiento [en formato HTML] de la querella del mencionado troll Daniel Vicente Carrillo.

No es la primera querella que nos hace, ya ganamos otra demanda que pretendía ejercer el derecho a rectificación por el mismo enlace, como así también diversos requerimientos adicionales (además de demandas y denuncias a más de 20 personas). Este auto es importante por varias razones:

En primer lugar reconoce que no somos fuente original y que los enlaces en Menéame son votados y aportados por los usuarios, sin intervención de los gestores del sitio, como ocurre en otras redes sociales, y que por lo tanto no somos responsables de la información transmitida.

También hay sobreseimiento al autor del blog y autor de las entradas del «troll del ciberspacio». La jueza considera que no cometió ningún ilícito, que los datos estaban publicados en el blog de Daniel Vicente Carrillo, y que el término troll no reviste carácter ofensivo, obedeciendo únicamente a una conducta de ciertos internautas y que se aplica por extensión a la persona que lo practica.

Creo que se puede deducir que aquella persona que se comporta como un troll en las redes y luego querella demanda y denuncia incluso a los que sólo publican enlaces a artículos críticos, abusando del sistema judicial en su condición de abogado, no se limita a ser solo un troll del ciberspacio.