Pego abajo una respuesta rápida a un comentario que dejé en el apunte de Juan Varela «Falta información original de calidad» y que está relacionada también con «Agregadores absurdos».

No sé si el modelo Digg/Menéame tiene futuro, ni siquiera sé si funcionará el año que viene o la «comunidad» que lo mantiene se canse mañana mismo. Pero no me parece razonable la crítica basada en expectativas personales más que en la realidad, la historia y el desconocimiento de cómo funcionan estas comunidades.

Mientras tanto, mientras funcione, sea divertido y no nos lleve a la quiebra, carpe diem.

Texto del comentario:

Juan, no es la primera vez que haces referencia al Menéame de forma «crítica» (una vez lo has hecho en Palma y no estaba presente para poder contestar).

Creo que no entiendo muy bien a qué lado apuntas, pero de lo poco que entiendo no estoy de acuerdo.

Lo fundamental es que no sé qué quieres decir con «estar informado», no encuentro definición precisa sobre el tema. Aúnque la hubiera, ¿qué tienen que ver los «agregadores» sociales con ello o la presunta «falta de información de calidad»?

El Menéame (o Digg o Fresqui..) no pueden ser comparados con webs noticias como pueden ser la de los medios digitales tradicionales, porque no tienen nada que ver. En principio un «agregador» social no pretende buscar y «generar» la noticia, sino simplemente hacerse eco de esas noticias y provocar la visita y lectura de los sitios enlazados. En esto ya hay una diferencia fundamental.

Pero la otra es más histórica, y no he encontrado ninguna referencia en tus apuntes: Slashdot y similares (Barrapunto como su clon en castellano).

Slashdot (o Barrapunto) nunca ha sido un sitio para «estar informado» en el sentido amplio que me parece le dais al concepto. Tampoco me parece que se le haya reclamado o exigido que cumpla con esas condiciones (y allí tienes a Slashdot con una facturación anual que ronda los 30 millones de dólares y nueve años de historia).

Hace unos pocos años se puso otro sitio similar, BoingBoing, con unos editores más «famosillos» y quizás con una temáticas menos «geek» y más abierta a curiosidades. Es todo un éxito, y nadie le exige que sirve para «estar informado».

El modelo de Digg (y todos los demás similares) viene de Slashdot y blogs como BoingBoing. Son similares en que la noticia viene de su propia audiencia y que en el primer caso permite comentar la noticia (y allí reside mucho del «jugo» y el éxito de /.) pero cambian en el método de selección de esas noticias: no lo hacen unos editores, sino los propios lectores. Es una pequeña diferencia pero que no sólo cambia la forma de «selección», sino que también afecta en cómo se relacionan los lectores y sus comentarios y hasta las entradillas de los enlaces (empezando por las quejas por los votos negativos).

Entonces, si estos agregadores (que no me gusta nada el nombre) están basado en un modelo bastante claro y con una diferencias también claras que producen otros efectos sociales interesantes. ¿Por qué lo criticas por no ser «de otra forma» sin siquiera analizarlo en contexto?

Como dije antes, busqué en tu blog (y en los otros) si había esta especie de análisis histórico, pero no lo hay. Como si no hubiesen existido, o lo más probable, por un desconocimiento cultural de lo que han significado Slashdot y luego Barrapunto y similares (NewsForge, Kuro5hin, Libertonia y las decenas de weblogs de grupos españoles).

Para acabar, tu «demandas» información de calidad. Tienes razón. Pero miro en tu blog, que se llama «periodistas21» y tampoco encuentro que haya información ni que sirva para «mantenerme informado». ¿Significa eso que tu blog es malo o me da razones para criticarlo? ¿Debería eso invalidar y restar valor a tu blog y la blogocosa en general porque se aplica la misma regla?

Claro que no, o eso creo. Por eso me parece que vuestros análisis son erróneos. O como mínimo incompletos y falto de «rigor histórico», como si hubiesen nacido de la noche a la mañana o como si modelo parecido (en cuanto a información e interacción) no hubiesen funcionado muy bien casi desde los inicios de la «internet comercial».

¿Que no sirve para «estar informado»? Lo más probable, al menos para una mayoría, pero eso no sé si es un problema o una ventaja.

Mi última pregunta, ¿por qué, en general, los que criticáis «conceptualmente» a estos modelos sabéis tan poco de cómo funcionan y los «intríngulis» del sistema y su «cocina»? (es evidente por la falta de «números» y datos en los análisis, y por otras apreciaciones erróneas) ¿Tanto pavor da probarlo y participar al menos por unos días para enterarse realmente de que lo mejor –desde mi punto de vista– no está en sólo echarle una leída a la portada? Si un «medio tradicional» hubiese hecho un análisis y crítica tan superficial, ¿que diríamos?